En estos últimos años hemos constatado la rapidez con la que los imprevistos pueden trastocar todo lo que damos por sentado. Y no cabe duda de que la incertidumbre generalizada (sobre aspectos como la inflación, la volatilidad macroeconómica, las tensiones geopolíticas o los cambios normativos) ha dominado las conversaciones en empresas de todos los sectores y regiones.
Pero, si tenemos en cuenta el ímpetu que han cobrado algunas tendencias en el ámbito de la contabilidad en los últimos años, la aceleración continua no parece tan evidente en 2023. De cara al próximo año, las tres predicciones que se detallan a continuación apuntan a los colosales cambios que van a transformar el área de finanzas y explican por qué los líderes de la contabilidad deberían apoyarse cuanto antes en esas tendencias.
1. La estrategia tecnológica se convertirá en la estrategia de talento de la empresa
La contratación y retención del talento es una de las principales dificultades que afrontarán los CFO. Entender qué quieren los empleados puede ser útil para responder a ese reto. Para muchos, la respuesta está en el trabajo significativo. Y los CFO saben que la tecnología es importante en ese sentido. Una encuesta global a 260 CFO reveló que casi la mitad (48 %) planea invertir en tecnología con el fin de optimizar las tareas financieras. Y lo que es aún más sorprendente, casi todos (99 %) los que priorizan la tecnología opinan que las novedades tecnológicas serán cada vez más importantes para atraer y retener empleados.
Para los equipos de finanzas y contabilidad, un trabajo significativo implica algo más que la mera agregación manual de datos o la gestión de engorrosas hojas de cálculo un día tras otro. La tecnología puede automatizar este tipo de procesos manuales y permitirá que el personal se centre en tareas que aportan más valor como, por ejemplo, la identificación de tendencias a partir de los datos, lo que ayudará a la empresa a entender el porqué de los números que manejan. Y esto será cada vez más crucial en un mercado de talento en el que los empleados financieros cualificados están más cotizados que nunca. Según Deloitte, un 82,4 % de los responsables de la contratación en empresas de capital abierto opina que la retención del talento en las áreas de finanzas y contabilidad es un gran reto. La inversión en tecnologías que automaticen los procesos fundamentales y optimicen la experiencia del usuario será esencial para crear (y retener) un equipo financiero capacitado y ágil.
2. El proceso orientado al cierre el mismo día fomentará la adopción de la automatización de la contabilidad mediante IA y ML
Tradicionalmente, la conciliación de los estados financieros al final del periodo de rendición de cuentas (ya sea este mensual, trimestral o anual) ha sido un proceso muy laborioso cuya realización puede prolongarse durante semanas. Además de consumir muchos recursos, un cierre arduo y largo ralentiza la velocidad a la que pueden analizarse los datos y la información llega a los encargados de tomar las decisiones. Eso representa una vulnerabilidad crítica en el entorno empresarial actual marcado por la incertidumbre y los cambios rápidos, donde la información interactiva no tarda en caducar.