Este año ha puesto más de relieve que nunca los retos que afronta el mundo en muchos aspectos: la sanidad, la justicia social, la inmigración, las crecientes divisiones en materia de política, así como los actos de violencia y racismo que debemos abordar con civismo y apoyo mutuo mientras cuidamos del equilibrio de nuestras dificultades personales e intentamos entender lo que ocurre.
A finales de mayo se cumple un año del asesinato de George Floyd y es también el momento de reflexionar a conciencia. La lucha por la justicia social no se inició ni finalizó con los eventos de ese día, pero sí marcaron un punto de inflexión en el que el dolor y la indignación se convirtieron en activismo en muchas ciudades del mundo, y en iniciativas más firmes de muchas empresas por lograr la igualdad.
En Workday habíamos realizado progresos, pero ahondamos más para replantearnos y revaluar cosas, y en algunos casos para reconstruir nuestras iniciativas para un cambio sustancial positivo. Aunamos esfuerzos para abordar tan importante tarea, formando un equipo con la misión de atender cuatro áreas fundamentales: la contratación y el desarrollo de talento diverso, el fomento de una cultura de pertenencia, la creación de productos y tecnologías inclusivos y el fortalecimiento de nuestras comunidades, con objetivos específicos en cada área. En nuestro avance para hacer realidad esos compromisos, infundiendo la filosofía VIBE™ (Value Inclusion, Belonging, and Equity) en nuestra manera de pensar y actuar, hemos aprendido que el camino hacia el cambio no es siempre una trayectoria rápida o lineal. En cualquier caso, creo que nuestros progresos son prometedores. Aunque algunas de esas áreas tarden más en producir resultados, seguiremos haciendo preparativos, revisando nuestros procesos, desarrollando nuevos programas y aprendiendo sobre la marcha.
El siguiente cuadro de mando muestra lo más destacado de algunos de nuestros progresos recientemente, y a continuación se ofrecen más insights y detalles: