Un sistema de clasificación revisado y acordado no solo por RRHH sino también por otras partes interesadas (como los departamentos jurídico, de cumplimiento y de representantes de los empleados, cuando proceda) proporciona coherencia interna y es la base de unos informes justificables. Cuando aparecen brechas salariales, las empresas pueden demostrar que sus agrupaciones han sido objetivas, precisas y transparentes.
Qué puede hacer: examine su sistema de evaluación de puestos. Identifique si hay solapamientos o carencias. A continuación, ponga en marcha un proyecto multifuncional (dirigido por RRHH pero con soporte jurídico y técnico) para crear una estructura de clasificación que sea explicable, trazable y apta para auditorías.
Paso 3: dar flexibilidad al modelo de compensación y beneficios
La directiva exige a las empresas que contabilicen la remuneración total de los empleados: no solo el salario base, sino también otras contraprestaciones recibidas en relación con su empleo (como bonus, asignaciones, horas extraordinarias, pensiones, compensación por formación, subsidios por enfermedad y recompensas no monetarias). Para hacerlo bien, conviene modelar estos elementos en las diversas regiones y categorías de puestos, y adaptarlos a lo largo del tiempo.
Los sistemas de compensación rígidos no pueden hacer frente a este desafío. Las empresas deben segmentar, agrupar y simular varios escenarios que les ayuden a entender cómo contribuye cada elemento a la retribución global, y dónde pueden producirse distorsiones. Un modelo flexible no solo permite elaborar informes, también aporta insights. ¿Cómo son los beneficios de los distintos grupos de empleados comparados entre sí? ¿Dónde se producen los valores atípicos? ¿Qué señales revelan un sesgo involuntario?
Qué puede hacer: utilice Workday para consolidar y notificar sus datos de compensación en múltiples dimensiones. Integre el salario, los bonus, los beneficios y otros componentes para identificar qué áreas requieren un enfoque interdepartamental. Asegúrese de que su infraestructura de datos es lo suficientemente flexible como para hacer frente a los inevitables cambios requeridos a medida que se va interpretando la legislación local. La flexibilidad de hoy evitará sorpresas mañana.
Paso 4: compartir los rangos salariales y abordar las incoherencias de forma proactiva
Los rangos salariales o niveles de retribución se harán públicos a través de los derechos de los empleados a la información salarial y, posiblemente, de los anuncios de puestos. Las empresas deben prepararse para divulgarlos y también para justificarlos. Sin alineación interna no tardarán en surgir discrepancias.
La dificultad no radica en la exigencia externa de transparencia, sino en asegurar que la lógica interna resista el escrutinio. ¿Puede explicar por qué dos roles de igual valor reciben salarios diferentes? ¿Están las diferencias relacionadas con el desempeño, la ubicación o el diseño de los roles? ¿O son signos de incoherencias?
En una preparación proactiva, los rangos se revisan antes de implementarlos. ¿Puede simular comparaciones entre unidades de empresa? ¿Sabe si los bonus distorsionan la cuantía del salario base? ¿Puede esclarecer criterios de desempeño confusos? Si hace todo eso con antelación, evitará tener que hacer correcciones posteriores.
Qué puede hacer: lleve a cabo una auditoría de transparencia salarial con el equipo jurídico bajo secreto profesional, para examinar la estructura de rangos y la coherencia interna. Asegúrese de que sus descripciones (sobre desempeño, benchmarks de mercado y lógica de bonus) están documentadas y listas para comunicarse. Dote a los mánagers de la confianza necesaria para explicar claramente las estructuras salariales.
Paso 5: optimizar y personalizar la arquitectura de puestos
Los roles evolucionan, las regiones se amplían y los umbrales de cumplimiento normativo varían. Una arquitectura optimizada pero personalizable permite elaborar informes fiables y alinear la estrategia.
Muchas empresas siguen operando con estructuras obsoletas: perfiles duplicados, clasificaciones incoherentes, roles legacy. La directiva ejerce presión sobre estos sistemas. Si no es posible categorizar claramente los puestos y compararlos de forma relevante, los informes salariales se convierten en conjeturas.
El objetivo es limpiar, consolidar y sistematizar lo existente. Herramientas modernas, como Workday, pueden servir para detectar duplicados, sugerir puestos idóneos y mejorar la descripción de roles. Lo importante es una estructura que se adapte sin que se pierda la coherencia.
Qué puede hacer: la directiva establece que las condiciones laborales, las competencias o skills, el esfuerzo y la responsabilidad son cuatro dimensiones que deben tenerse en cuenta en la categorización de los empleados (pueden aplicarse otros factores relevantes cuando proceda). ¿Están reflejados estos elementos en su arquitectura de puestos actual? ¿Tiene roles poco claros o incoherentes? ¿Puede mantener la arquitectura y ampliarla para las nuevas necesidades de la empresa? Una arquitectura de puestos bien estructurada no es solo una herramienta para elaborar informes. Es la base de unas decisiones salariales justas y explicables.
Conclusión: las empresas que empiecen ahora determinarán el resultado. La Directiva de Transparencia Salarial de la UE no tiene como único fin el cumplimiento normativo. Se propone hacer visibles el valor y la equidad. Las empresas que se preparen con antelación (creando una estructura y activos de datos pertinentes, y alineando las narrativas) estarán mejor posicionadas para cumplir sus obligaciones y generar confianza cuando la Directiva se incorpore a la legislación nacional y sea aplicable. Porque, en un mundo en el que las remuneraciones son información pública, el grado de preparación determina la percepción. Y la percepción, más que nunca, es crítica para la empresa.
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Tenga en cuenta que la información que se proporciona aquí es solo para fines informativos y no constituye asesoramiento legal. Las empresas siempre deben consultar con sus propios asesores legales sobre cualquier asunto relacionado con el cumplimiento y determinar por sí mismas si la información proporcionada aquí satisface sus necesidades empresariales y de cumplimiento normativo.