Descubra las mejores prácticas de los responsables de RRHH para subir la moral y responder a las necesidades de los empleados en un momento de incertidumbre económica.
La incertidumbre económica ocupa la mente de todos los empleados. Tras haber superado la pandemia, la "Gran Renuncia" y las continuas exigencias de la falta de mano de obra, ahora, las empresas han de ser proactivas con sus estrategias de implicación del empleado y tranquilizar a los trabajadores ante la continua incertidumbre económica.
Pero ¿cómo subir la moral con tanta incertidumbre?
En nuestro informe "How to Improve Employee Engagement in an Economic Downturn" (Cómo mejorar la implicación de los empleados ante una coyuntura económica desfavorable), elaborado en colaboración con HR Exchange Network, se ofrece una respuesta clara. Los datos de una encuesta realizada a 470 responsables en recursos humanos (RRHH) muestran que la prioridad para el 21 % de ellos en 2023 es la implicación y la experiencia del empleado. Independientemente de los cambios económicos que vengan, será fundamental contar con una fuerza laboral implicada.
La mayor prioridad en 2023 para el 21 % de los responsables de RRHH es la implicación y la experiencia del empleado.
En Workday, definimos la implicación del empleado como el grado de conexión que un empleado tiene con su trabajo, sus compañeros y la empresa en general. Si los empleados se sienten desconectados, todos los aspectos del rendimiento de la empresa se verán afectados. Para evitarlo, hemos recopilado los tres insights más significativos del informe con el fin de apoyar a los líderes empresariales a la hora de promover mayores niveles de implicación.
Los analistas predijeron una recesión desde el inicio de la pandemia mundial; aun así, tres años después, nuestro futuro económico sigue sin estar claro. En el tercer trimestre de 2022, Estados Unidos experimentó un pequeño aumento (2,9 %) del producto interior bruto (PIB), en vez de disminuciones consecutivas. Asimismo, los indicadores habituales de recesión no se están manifestando.
Sin embargo, muchas empresas siguen preparándose para lo peor. Más de una quinta parte de los encuestados afirma que las dificultades económicas y la posible recesión repercutirían enormemente en los RRHH en 2023. De la misma manera, la mayoría se muestra de acuerdo (31,49 %) o muy de acuerdo (7,87 %) con la afirmación de que su empresa se está preparando para una recesión.
Como es comprensible, la inminente tormenta está generando ansiedad y estrés en los empleados. En la misma encuesta, se determinó que los tres mayores retos para mantener la implicación de los empleados son el desgaste profesional (23,32 %), la conciliación de la vida laboral y la personal (19,53 %) y la falta de implicación directa de los equipos de liderazgo con los empleados (16,33 %). Abordar estos problemas de forma directa no solo mejorará la implicación, sino que también promoverá una cultura más positiva y productiva de cara al futuro.
Uno de los principales factores que está provocando el desgaste de los empleados actualmente es el nivel de incertidumbre. Existe incertidumbre sobre el estado de la economía global, el rendimiento empresarial y, lo que es más importante, el papel que un solo empleado desempeña en el éxito continuo de la empresa. Si un empleado se percibe como un simple engranaje más, es posible que su implicación sea menor. Por ello, la personalización es esencial.
El 23,32 % de los responsables de RRHH afirma que el mayor reto para mantener la implicación del empleado es el desgaste profesional.
Personalizar la experiencia del empleado no implica cambiar la política de la empresa cada vez que alguien haga una petición. En cambio, se refiere a flexibilizar los procesos desde el inicio, apoyar a los empleados en los momentos clave y permitir que los mánagers y sus subordinados directos se comuniquen abiertamente. Si un empleado puede expresar honestamente sus cambiantes necesidades y ver que se toman medidas en consecuencia, su implicación con la empresa será mayor.
La desconexión entre los empleados y los equipos de liderazgo es uno de los principales factores que provoca la desvinculación. Existen dos razones para ello.
Por un lado, si sus empleados no comprenden en su totalidad la dirección que la empresa está tomando y las razones que motivan las decisiones empresariales, les resulta difícil sentirse implicados en el proceso. Por otro lado, si sienten que no desempeñan ningún papel en la dirección que la empresa toma, es imposible que haya implicación por su parte.
Es muy fácil ser transparentes sobre las decisiones positivas, como los bonus y los programas de beneficios de la empresa, pero se ha de aplicar la misma transparencia a las decisiones más delicadas, como las redundancias o los requisitos de la vuelta a las oficinas. Abordar los problemas directamente, ofreciendo respuestas y razonamientos concisos y ofrecer a los empleados un espacio donde expresar sus opiniones es imprescindible para mantener la implicación de toda la empresa.
Al personalizar los procesos de sus empleados y comunicar las decisiones empresariales con sinceridad no solo aumenta la implicación, sino también la confianza. Mantener la confianza de los empleados requiere que las empresas promuevan su bienestar y seguridad psicológica en cada nivel de la empresa. Esa confianza y seguridad serán esenciales para las empresas que prosperen en los próximos años.
La desconexión entre los empleados y los equipos de liderazgo es uno de los principales factores que provoca la desvinculación.
El primer paso es mantener a los empleados informados sobre las prestaciones de bienestar que ofrece. Facilitar programas de asistencia a los empleados solo cumple su cometido si los empleados saben cómo acceder a ellos. El mismo enfoque proactivo se extiende a garantizar que los empleados dispongan de parámetros claros que les permitan conciliar adecuadamente su vida laboral y personal. De poco sirve que los mánagers crean que el horario de trabajo es de 9:00 a 17:00 si los empleados suelen trabajar hasta las 19:00.
Sin embargo, lo que es más importante es que tengan un espacio donde expresarse. Una plataforma inteligente y de atención continua garantiza que sus empleados puedan manifestar sus preocupaciones con confianza, lo que promoverá una verdadera seguridad psicológica y un diálogo bidireccional entre empleados y mánagers. Ese nivel de confianza es básico para una implicación coherente y continua.
Para conocer más insights acerca de los beneficios empresariales de encuestar periódicamente a los empleados y otras formas de aumentar su implicación, además de recomendaciones de miembros clave del equipo de Workday, lea el informe completo.
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