El ritmo de los negocios es aún más rápido ahora, ya que las empresas planifican la vida tras la COVID-19. Lo que está de moda hoy se convierte en la disrupción de mañana, y esta última finalmente definirá una nueva forma de trabajar.
Se dice que la velocidad es la máxima ventaja en los negocios. Este concepto tiene especial importancia hoy en día: el ritmo de los negocios es aún más rápido ahora, a medida que las empresas planifican la vida tras la COVID-19. Lo que está de moda hoy se convierte en la disrupción de mañana, y esta última finalmente definirá una nueva forma de trabajar.
La pregunta es: cuando llegue la disrupción (que lo hará), ¿cuándo y cómo iniciará su transformación? ¿Y qué ocurre si no actúa con la rapidez suficiente?
Muchas empresas se esfuerzan por responder a estas preguntas. Sin embargo, la mayoría se está dando cuenta de que existe un abismo entre el ritmo del cambio y su capacidad para seguirlo. Workday define esto como la brecha de la aceleración. Ya empezaba a aparecer antes de la pandemia, pero el año pasado puso a prueba la capacidad de respuesta de todas las empresas.
De hecho, la alta dirección afirma que la brecha de la aceleración es real:
Un 63 % dice que los procesos y la ejecución son muy lentos en sus empresas.
Un 80 % dice que su empresa tarda demasiado en tomar decisiones.
Un 74 % dice que su empresa no está preparada para el futuro inmediato. Saben que el reskilling es urgente, pero solo un 10 % está preparado para ello.
Un 75 % dice que su empresa está estancada debido al uso de sistemas aislados que entorpecen sus acciones.
Un 67 % dice que su empresa está perdiendo terreno. Creen que si no se adaptan llegarán a ser irrelevantes.
Seguir con un sistema legacy probablemente ampliará la brecha de la aceleración en lugar de cerrarla.
La buena noticia es que muchos de nuestros clientes ya han cerrado la brecha de la aceleración. Uno de los cambios importantes que han realizado ha sido pasar de:
Las finanzas y la planificación centradas en las finanzas a la planificación en toda la empresa.
La planificación anual a la continua, con planes siempre actualizados.
La estrategia puntual que rápidamente se ha vuelto obsoleta ante el cambio a la recalibración continua donde los ajustes se realizan rápidamente.
Con el fin de mantener la velocidad, estas empresas adoptan un proceso de planificación continua habilitado a través de previsiones dinámicas y situaciones hipotéticas. Asimismo, crean varias situaciones hipotéticas no solo para la planificación operativa, sino también para la planificación de la fuerza laboral, las ventas y la demanda en nuestra plataforma de modelado flexible.
Sin embargo, existe la necesidad de ir más allá de la planificación continua a un proceso ágil que permita a las empresas crear planes de forma dinámica, ejecutarlos, analizar los resultados y volver a planificar a medida que cambian las condiciones. Al llevar a cabo la recalibración continua, puede impulsar mejoras constantes en un círculo virtuoso:
Comprender cómo se desempeña y toma medidas (analizar).
Conectar este análisis como base para sus planes (planificar).
Y colaborar y llevar a cabo los planes (ejecutar).
Los CFO con visión de futuro ya han integrado la recalibración continua. Para la mayoría de los líderes financieros, ampliar la capacidad de recalibrar continuamente sus procesos de planificación y generación de informes supone una parte fundamental de su misión para mejorar su agilidad empresarial. Incluso antes de la pandemia, las empresas empezaron a explorar la planificación continua frente a la anual, con el objetivo de ser más ágiles de lo que los planes anuales podrían permitirles. Esto se debe a que un proceso de planificación continua proporciona a los equipos financieros los insights y la capacidad que necesitan para responder con rapidez y eficacia a las condiciones de las operaciones y los mercados en el mundo real a medida que cambian.
Sin embargo, para llevar a cabo la recalibración continua, debe contar con una sola fuente de información —lo que Workday denomina el "Core de datos inteligente"— con datos de alta calidad, detallados, precisos y oportunos. La adquisición de este Core de datos inteligente implica que ya no tendrá que cargar con un sistema de planificación de recursos empresariales (ERP) legacy. Esto se debe a que el modelo de ERP del antiguo mundo mira al pasado y se centra en analizar lo que sucedió mucho después del hecho. Se basa en datos aislados y obsoletos y en procesos anquilosados que no reflejan las necesidades actuales de una empresa. Además, a menudo, las empresas cometen el error de trasladar su antiguo sistema de ERP al entorno cloud, lo que no ofrece ninguno de los beneficios de un verdadero sistema cloud. Seguir con un sistema legacy probablemente ampliará la brecha de la aceleración en lugar de cerrarla.
Incluso las empresas que utilizan una solución de planificación moderna basada en tecnología cloud para prever, presupuestar y modelar situaciones hipotéticas pueden ver afectados el gran potencial y el ROI de sus inversiones en la planificación por culpa de rígidos sistemas ERP legacy. La falta de dimensionalidad (del contexto y la granularidad que rodean a los datos) provoca una falta de insights. Además, el acceso latente a los datos puede frustrar los esfuerzos para establecer un entorno de planificación y recalibración continuo.
Aquí es donde entra en juego un entorno cloud empresarial moderno y unificado. Por ejemplo, el sistema cloud de gestión empresarial de Workday reúne finanzas, gestión de gastos, RRHH, planificación y análisis en un solo sistema. Además, es la base de la aceleración digital para las empresas con un alto ritmo metabólico, aquellas empresas que reconocen que deben funcionar a una nueva velocidad.
Gracias a este moderno entorno cloud de gestión empresarial, sus equipos pueden recalibrar continuamente al producirse cambios mediante un solo sistema en el que planificar, ejecutar y analizar cada aspecto de su negocio. La planificación continua le permite anticipar varias situaciones a medida que ocurren cambios rápidos. Esos planes se convierten en acciones de inmediato, alineando personas y recursos para potenciar los mejores resultados posibles. Y los analytics basados en machine learning detectan si es preciso corregir el rumbo y qué planificar a continuación, para adelantarse a los cambios que se suceden vertiginosamente.
Cuando llegue la disrupción (que lo hará), ¿cuándo y cómo iniciará su transformación?
Algunos de nuestros clientes que han realizado el cambio ya ven grandes resultados. Por ejemplo, el proveedor de atención médica ChristianaCare pasó de la planificación anual a la continua en menos de una semana, incluso cuando la empresa estaba ocupada lidiando con las consecuencias de la COVID-19 en sus operaciones.
"Nuestro equipo pudo adaptarse rápidamente a pesar de las muchas incógnitas que había al comienzo de la pandemia", recuerda Kevin Kain, director de planificación financiera y análisis de operaciones de ChristianaCare. "Nuestro equipo tenía que ser innovador, tomar decisiones con rapidez y comprender las implicaciones financieras de esas decisiones. Rápidamente pudimos sustituir la elaboración anual de los presupuestos por una previsión mensual en nuestro centro de costes. Asimismo, tuvimos que realizar un seguimiento de todos nuestros gastos relacionados con la COVID-19 y todas nuestras opciones de mitigación. Hicimos el cambio en cuatro días".
¿Cuál es la lección aprendida? Las empresas que usan estrategias de transformación para cerrar la brecha de la aceleración liderarán sus mercados. Aquellas que no pueden hacerlo terminan preguntándose cómo lo hizo la competencia.
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